Todos los gobiernos de occidente están preocupados por posibles atentados yihadistas. Es difícil controlar a los lobos solitarios que pueden sembrar el caos robando una furgoneta o un camión y utilizándolo como arma.
Muchos países están endureciendo sus políticas migratorias para intentar defenderse de este tipo de atentados, pero hay una amenaza en la que, casi nadie hace hincapié y que es mucho más peligrosa que este tipo de atentado terrorista.
Vivimos en un mundo en el que la tecnología lo controla prácticamente todo. Ya hablé en mi anterior post de la dependencia brutal que estamos desarrollando hacia lo tecnológico.
La economía de los países es una entelequia que se sostiene en el mundo virtual. Todos los datos que nos identifican están en la red, en los servidores del estado, de los ayuntamientos, de las comunidades autónomas, de los bancos, de la policía…Nuestra identidad, donde vivimos, el dinero que tenemos…No se si veis a donde quiero llegar, pero creo que un hacker con la suficiente habilidad como para hacer caer, o inutilizar, los servidores de un estado, de la bolsa o de los bancos; podría sembrar el caos de maneras inimaginables.
Pero esto no es lo más peligroso. También estas informatizados los silos de misiles, las centrales nucleares o los transportes e infraestructuras (imaginaros modificar la información que recibe una torre de control de los aviones que van aterrizar). Parece un poco de ciencia ficción lo que digo, pero creo que también es una amenaza real y que los gobiernos no le están prestando la debida atención. Estamos dando todo el poder a la tecnología y aquel que la controle puede sumirnos en el caos definitivo.
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